SÍNDROME DEL MOTORISTA Y LA FALTA DE CONSECUENCIAS

Por:

Carlos Lara,
Redacción Desde la Fuente,

Por Hilario Malaquias Santana

En este país es normal que los motoristas se pasen el semáforo en rojo y no les pasa nada, tambien circulan en vía contraria y no les pasa nada, circulan sobre la acera y no les pasa nada. Incluso andan sin casco, sin papeles o sin placa y no les pasa nada. Los motoristas corren sobre elevados donde se tiene prohibida su circulación, y no les pasa nada 😐

Y también vemos a guardias y policías (agentes cuya función principal es respetar y hacer respetar las leyes) circulando en motores sin el casco, sin placa, pasando los semáforos en rojo, y tampoco les pasa nada. 😐

Estas violaciones a la ley de tránsito la cometen aunque estén frente a los agentes de la Amet o la Digesett, quienes, ante tal afrenta, se quedan indiferente. No les pasa nada, no les llega ninguna multa a su casa, no le quitan la licencia de conducir, no le quitan el motor, no lo llevan preso. Y a pesar de todas esas faltas pueden seguir moviéndose por todas la ciudad porque saben que no van a tener consecuencias por esas violaciones.

La gente observa, la gente mira, la gente piensa: si los motorista constantemente violan las leyes y no les pasa nada, entonces en este país se pueden violar las leyes y las buenas costumbres y no me va a pasar nada. Se origina así un sin numero de personas que entienen que en este país se puede hacer cualquier cosa, aunque se rompan o se burlen de las leyes. Pará muestra un boton: los motoristas.

Como las motocicletas están en todos los rincones del pais y actúan de la misma forma, esa actitud poco civilizada, salvaje y deshonesta, se desparrama por todos los sectores y clases sociales de la República Dominicana. Así se origina un mar de falta de respeto, violaciones a las leyes y a las buenas costumbre que comunmente se observan en la sociedad Dominicana. Estas malas acciones que constantemente se producen tanto de parte de muchos malos ciudadanos, como de parte de muchas autoridades civiles y militares, y que lamentablemente NO TIENEN CONSECUENCIAS.

Producto de eso,
es normal encontrarse con vehículos parqueados al lado de una señal de tránsito que dice «No Parqueo». Y causan un gran entaponamientos vehicular por estar parqueado en un lugar prohibido. Todos lo vemos. Pero no pasa nada. Y así sucede con muchas otras señales de tránsito. 😐

– La gente tira la basura en la calle y no pasa nada. Habitamos en calles donde aparece una basura en cualquier lugar. Incluso, cuando esta lloviendo se observa a personas tirando la basura en los contenes para que la corriente de agua se la lleve. Consecuentemente se tapan los imbornales y se producen inundaciones 😐

– Algo que sucede en cualquier barrio, en culquier ciudad, un propietario con la finalidad de agrandar su casa decide apropiarse de la acera y hasta del contén. Suben muros de concreto sobre un área evidentemente pública, obligando a los peatones a tírese a la calle. Todos lo ven y lo sufren. Pero no aparece una autoridad que haga valer el respeto al ciudadano 😐

– Una entidad del gobierno destapa un imbornal y hace una loma de la basura y tierra que le saca al mismo sobre la acera contigua, con lo cual obstruye el libre paso. Los peatones tienen que tirarse a la calle para pasar. La loma de tierra y desperdicios se queda en la acera sin límite de tiempo. La entidad gubernamental no termina su trabajo y no pasa nada 😐

Así la falta de consecuencias ante hechos deshonesto, bochornoso y abusivos desatan una ola de corrupción que se extiende por todos los estamentos del estado. Como muestra encontramos la declaración que el 1ro. de diciembre de 2022 realizó el comisionado para la reforma de la Policía Nacional, José Vila del Castillo, quien afirmó que «la corrupción en la Policía comenzaba en la Dirección General hasta el último raso» 😲

Eso explica porque un Director General Policial, que tiene el más alto salario en la institución y que apenas llega a RD$102,957.83 mensuales, hace una declaración jurada de patrimonio de más de 77 millones.

Este mal pica y se extiende. Lo encontramos en casi todas de las instituciones del país. Y todo porque a la gran mayoría de los que hacen lo malo, los que violan las leyes, las reglas y las buenas costumbres, saben que no les va a pasar nada. Están seguro de que están protegidos por la falta de aplicación de consecuencias qué reina en el país.